lunes, 30 de mayo de 2011
El enigmatico Vincent Valentine
Un personaje al que hay que dedicarle tiempo: El legendario Sephiroth
El mas grande soldado de los videojuegos
de Final Fantasy y villano preferido.
viernes, 27 de mayo de 2011
Una Leyenda que determina la vida de nuestro planeta como no la conocimos nunca...
Una historia dice que nuestras almas van a la corriente vital...donde su guardian las custodia su nombre es Omega. Caos es pues su escudero pero se dice que cuando Caos despierte traera la destruccion pero Omega despertara recogiendo toda la corriente vital del planeta embarcandose en un viaje de estrellas...
El problema fue cuando Caos despertó por que su letargo termino pues este no despertó para la destruccion sino por que algo estaba corrompiendo la corriente vital.... no se sabia por lo que era.
Caos nacido de una corriente vital corrompida y Omega nacido de una corriente vital pura serian enemigos por la eternidad...
Bueno pues al despertar Caos, Omega hizo su aparicion, pues Caos traeria el fin del mundo, tras esto se supo que la corrupcion de la corriente vital no era la tal que la accion de los humanos, Omega recogio las almas y en su desposicion a viajar por el mar de estrellas Caos vio a un humano llorar, con lo cual él decidio parar a Omega, Caos tenia un gran poder ya que este tenia un poder oscuro y Omega el poder de todos en un solo ser: él mismo, fué una gran batalla pero Caos dio su vida por los humanos y impactaron uno con el otro con tales energias que desaparecieron...
El humano ese día soño con Caos y le dijo que si seguian asi: con guerras, luchas, competencia, etc...Omega haria su reaparicion y el mismo tambien pero esta vez Caos no sentiria compasion ni melancolia por ellos.
Tras esto una luz lo desperto diciendo:"Estoi seguro de que volvera pasar" tras esto el humano volvio a dormir.
Al dia siguiente el dia no era claro, no era oscuro, era verde, color de la corriente vital y la noche purpura,color del alma de Caos...El humano supo entonces que en un futuro donde las guerras, competencias y todo daria lugar a Omega y Caos, "La ultima voluntad del planeta"
Se dice que cuando el dias es oscuro y la noche clara, se ve a lo lejos el resplandor de dos luces: una violeta y una verde: Caos y Omega...
Caos y Omega haciendo su aparición...inpresionantes poderes...
*Tal como va el planeta pasará, "la ultima voluntad"*
La gran leyenda de la creacion del mundo
Cuenta la leyenda que aún se recoge en algunas tradiciones enanas y entre los clanes nórdicos de Sakhrog, que del Vacío Absoluto, cuando nada existía en el Cosmos, fue elDemiurgo Primordial, que está en todas partes, quién dotó de luz a las estrellas, colgándolas del Cielo como lámparas inextingibles. Bajo el resplandor estelar, el Demiurgo siguió trabajando para colmar ese Vacío de algo que poco después sería llamado Vida.
La Vida fue fraguada en un lugar que modeló con sus propias manos, entre la Tierra y el propio Cielo. La Naturaleza fue la primera Hija de la Tierra, como las Estrellas lo eran del Cielo, pero seguía sin ser suficiente para colmar el Vacío. Es por ello que el Demiurgo comenzó a Sentir, dando lugar a la Esperanza, la Bondad, la Felicidad, pero también a la Soledad, la Maldad y la Tristeza, puesto que nadie más que él existía en el Cosmos. Aunque hubiera creado Vida, el Vacío Absoluto se había trasladado a su propia alma.
De esta manera, el Demiurgo Primordial se dividió en dos mitades, pues no soportaba albergar sentimientos tan dispares en su interior. Una de estas mitades se denominóBahamut, una entidad sagrada que estaba colmada por el Bien y la Luz; mientras que la otra mitad fue llamada Tiamat, un ente profano que representaba todo el Mal y la Oscuridad. Es por ello que Bahamut se convirtió en el Día y Tiamat en la Noche, adoptando como forma material la de dos Grandes Sierpes.
Pero ambas Entidades seguían estando solas en esta Vida, por lo que tomaron la decisión, casi de manera coetánea, de engendrar lo que posteriormente fue conocido como El Primer Linaje. Del Primer Linaje nacieron diez vástagos, los cinco Hijos de Bahamut y los cinco Hijos de Tiamat, los cuales heredaron de sus creadores su propia esencia interior y la motivación de su Sentir. Todos ellos, los diez, tenían un objetivo específico que cumplir, como Protectores o como Opresores de la Vida, para así mantener durante toda la eternidad el Equilibrio del Cosmos.
Los Hijos de Tiamat, Opresores de la Vida, eran conocidos como: Gorbash, el Rojo, Sierpe del Fuego; Arkalas, el Verde, Sierpe de la Tierra; Ishara, la Negra, la Primera Madre, Sierpe del Viento; Scarnaz, el Azul, Sierpe del Agua; Arkon, el Blanco, Protector del Templo de Tiamat, Sierpe del Cielo. Y por otra parte, estaban los Hijos de Bahamut, Protectores de la Vida, que fueron denominados: Lazerus, el Áureo, Dragón del Sol; Seldune, la Argéntea, Dragón de la Luna; Termen, el Broncíneo, Dragón del Juicio; Mastria, la Cobriza, Dragón de la Magia;Kalender, el Ocre, Dragón del Tiempo. Del emparejamiento de estos Hijos, nacieron el resto de razas de la Vida, perteneciendo al Segundo Linaje los Draconianos. En el Tercer Linaje encontraríamos a los Elfos, Enanos, Fatas y Orcos. Y así, sucesivamente, hasta que llegó el Último Linaje: los Humanos.
Cuando el Último Linaje llegó, para entonces, Tiamat y Bahamut habían abandonado ese lugar entre Tierro y Cielo, legándoles la Vida a todos los Hijos que habían ido engendrando durante el devenir de los milenios. Se dice que el Último Linaje contenía en su interior la esencia de todos los anteriores, por lo que se les consideró, desde el principio, como los verdaderos herederos de aquel mundo que había había colmado el Vacío Absoluto. En este mundo, todavía moraban los Hijos de Bahamut y los Hijos de Tiamat, que durante todo este tiempo lucharon entre sí en esa eterna batalla que debía preservar el Equilibrio del Cosmos.
Y fue en el Reino de Ritteller donde esta batalla se decantó definitivamente, pues en este mágico reino se asentaron los Hijos de Tiamat, estableciendo sus moradas y santuarios en distintos lugares de sus tierras, mientras que los Hijos de Bahamut tuvieron que exiliarse en otros reinos como el de Sámedar y Avanesse, para evitar su derrota total. De esta manera, los Hijos de Bahamut se disgregaron, perdiéndose entre el resto de Linajes, adoptando sus formas y costumbres para pasar desapercibidos, mientras que los Hijos de Tiamat se mantuvieron unidos en Ritteller, lugar en el que dieron rienda suelta a su pérfida naturaleza.
Como todo el mundo sabe, durante la Era de los Héroes, cuando la situación ya se consideraba insostenible, las tres razas predominantes de Ritteller, Humanos, Elfos y Enanos, decidieron acabar con esta tiranía del Primer Linaje de Tiamat, aunque muchos de ellos ya habían olvidado esta historia.
Y de la unión en Alianza Ancestral de todos ellos, se forjó la Máscara de la Sierpe... con la cual los Hijos de Tiamat fueron desterrados para siempre.
La Vida fue fraguada en un lugar que modeló con sus propias manos, entre la Tierra y el propio Cielo. La Naturaleza fue la primera Hija de la Tierra, como las Estrellas lo eran del Cielo, pero seguía sin ser suficiente para colmar el Vacío. Es por ello que el Demiurgo comenzó a Sentir, dando lugar a la Esperanza, la Bondad, la Felicidad, pero también a la Soledad, la Maldad y la Tristeza, puesto que nadie más que él existía en el Cosmos. Aunque hubiera creado Vida, el Vacío Absoluto se había trasladado a su propia alma.
De esta manera, el Demiurgo Primordial se dividió en dos mitades, pues no soportaba albergar sentimientos tan dispares en su interior. Una de estas mitades se denominóBahamut, una entidad sagrada que estaba colmada por el Bien y la Luz; mientras que la otra mitad fue llamada Tiamat, un ente profano que representaba todo el Mal y la Oscuridad. Es por ello que Bahamut se convirtió en el Día y Tiamat en la Noche, adoptando como forma material la de dos Grandes Sierpes.
Pero ambas Entidades seguían estando solas en esta Vida, por lo que tomaron la decisión, casi de manera coetánea, de engendrar lo que posteriormente fue conocido como El Primer Linaje. Del Primer Linaje nacieron diez vástagos, los cinco Hijos de Bahamut y los cinco Hijos de Tiamat, los cuales heredaron de sus creadores su propia esencia interior y la motivación de su Sentir. Todos ellos, los diez, tenían un objetivo específico que cumplir, como Protectores o como Opresores de la Vida, para así mantener durante toda la eternidad el Equilibrio del Cosmos.
Los Hijos de Tiamat, Opresores de la Vida, eran conocidos como: Gorbash, el Rojo, Sierpe del Fuego; Arkalas, el Verde, Sierpe de la Tierra; Ishara, la Negra, la Primera Madre, Sierpe del Viento; Scarnaz, el Azul, Sierpe del Agua; Arkon, el Blanco, Protector del Templo de Tiamat, Sierpe del Cielo. Y por otra parte, estaban los Hijos de Bahamut, Protectores de la Vida, que fueron denominados: Lazerus, el Áureo, Dragón del Sol; Seldune, la Argéntea, Dragón de la Luna; Termen, el Broncíneo, Dragón del Juicio; Mastria, la Cobriza, Dragón de la Magia;Kalender, el Ocre, Dragón del Tiempo. Del emparejamiento de estos Hijos, nacieron el resto de razas de la Vida, perteneciendo al Segundo Linaje los Draconianos. En el Tercer Linaje encontraríamos a los Elfos, Enanos, Fatas y Orcos. Y así, sucesivamente, hasta que llegó el Último Linaje: los Humanos.
Cuando el Último Linaje llegó, para entonces, Tiamat y Bahamut habían abandonado ese lugar entre Tierro y Cielo, legándoles la Vida a todos los Hijos que habían ido engendrando durante el devenir de los milenios. Se dice que el Último Linaje contenía en su interior la esencia de todos los anteriores, por lo que se les consideró, desde el principio, como los verdaderos herederos de aquel mundo que había había colmado el Vacío Absoluto. En este mundo, todavía moraban los Hijos de Bahamut y los Hijos de Tiamat, que durante todo este tiempo lucharon entre sí en esa eterna batalla que debía preservar el Equilibrio del Cosmos.
Y fue en el Reino de Ritteller donde esta batalla se decantó definitivamente, pues en este mágico reino se asentaron los Hijos de Tiamat, estableciendo sus moradas y santuarios en distintos lugares de sus tierras, mientras que los Hijos de Bahamut tuvieron que exiliarse en otros reinos como el de Sámedar y Avanesse, para evitar su derrota total. De esta manera, los Hijos de Bahamut se disgregaron, perdiéndose entre el resto de Linajes, adoptando sus formas y costumbres para pasar desapercibidos, mientras que los Hijos de Tiamat se mantuvieron unidos en Ritteller, lugar en el que dieron rienda suelta a su pérfida naturaleza.
Como todo el mundo sabe, durante la Era de los Héroes, cuando la situación ya se consideraba insostenible, las tres razas predominantes de Ritteller, Humanos, Elfos y Enanos, decidieron acabar con esta tiranía del Primer Linaje de Tiamat, aunque muchos de ellos ya habían olvidado esta historia.
Y de la unión en Alianza Ancestral de todos ellos, se forjó la Máscara de la Sierpe... con la cual los Hijos de Tiamat fueron desterrados para siempre.
Leyenda del legentario Odín
ODÍN, el KETHER de la Kábala, también llamado Woden o Wotan es el “Padre de los Dioses”, se le conocía también como el “Señor de la guerra” (interior) y como padre de los “muertos gloriosos” (muertos psicológicos). Su residencia era el Valhalla y desde su trono se contemplaban los nueve mundos. Dos pájaros (Ravens) le acompañan y le informan de todo lo que ocurría en los nueve mundos.
Era también el más sabio de los Dioses, pero lograr la sabiduría no le fue fácil. En muchos grabados se le representa con un solo ojo. Veamos por qué conociendo su historia:
Desde su nacimiento se sintió ávido de alcanzar la Sabiduría; tras buscar donde la podría hallar, supo que en las raíces del árbol sagrado (el Yggdrasil) se encontraba un pozo cuya agua daba la Sabiduría. Dicho pozo estaba guardado por la cabeza de Mimir, una Diosa que había sido decapitada. Tras conseguir descender hasta el pozo en las raíces del gran árbol (el descenso a la novena esfera), se encontró con la cabeza de Mimir (la decapitación psicológica) que le puso como condición el que debía darle uno de sus ojos (el sacrificio) para dejarle beber del pozo de la Sabiduría.
Desde entonces se dice que cuando hai luna nueva en el dia en el que el viento sea fuerte el aparecerá a lomos de Sleipner su caballo de 6 patas venido del infierno para llevarse con él a las almas que no sean bienvenidas en el mundo de los mortales, se dice que los castiga con su sable al que se le denomina Sable Justiciero.
La leyenda del YIN-YAN
"El poder creador de Pan Gu separo los elementos preexistentes en el yin y el yang, la Tierra y el cielo, dos fuerzas opuestas pero complementarias entre si que de acuerdo con la filosofía tradicional china dieron forma no solo a los seres vivos, sino al universo entero".
El yin suele asociarse con entidades femeninas y absorbentes, como la pasividad, la oscuridad y la Luna, mientras el yang tiende a relacionarse con lo masculino y penetrante, como la actividad, la luz y el Sol. En el reino de los animales, el yin equivale al tigre y el yang al dragón, y en el paisaje, los valles son el yin y las montañas el yang. Por otro lado, las líneas irregulares y los números pares son yin, mientras que las rectas y los números impares son yang. Las dos fuerzas se hallan en constante fluctuación a lo largo y ancho del universo, una cediendo la tierra y otra ganándolo, como cuando la luz da paso a la oscuridad o el calor al frió, y viceversa. De su interacción surge precisamente el mismo proceso de la vida, y suele representarse gráficamente como las dos mitades entrelazadas de un círculo, una oscura y la otra clara.
Se desconoce cuando surgió por primera vez el concepto del yin y el yang, pero ya en el Siglo III a.C. los filósofos taoístas, con Zou Yan a la cabeza, fundamentaban en el toda la historia y la cosmologia. También a Zou Yan se le suele atribuir la noción del Wu Xing. O los cinco elementos “la tierra, la madera, el metal, el fuego y el agua”, con los que se suelen asociar el yin y el yang. Según Zou Yan, tanto la historia como el universo se moldearon en su día a partir de las interacciones de estos agentes, que en el fondo no eran más que manifestaciones de esa fluctuación permanente entre el Yin y el Yang.
Para los taoístas, la oposición entre el Yin y el Yang es una manifestación por la unidad trascendente de Tao “el camino”. Por otro lado, tienden a identificarlos como las dos almas que posee cada persona, la material “Yin” y la celestial o hun “Yang”; cuando están en armonía se tiene buena salud, pero si se da cierto conflicto o división entre ellas se llega a una situación de enfermedad o incluso de muerte.
El yin suele asociarse con entidades femeninas y absorbentes, como la pasividad, la oscuridad y la Luna, mientras el yang tiende a relacionarse con lo masculino y penetrante, como la actividad, la luz y el Sol. En el reino de los animales, el yin equivale al tigre y el yang al dragón, y en el paisaje, los valles son el yin y las montañas el yang. Por otro lado, las líneas irregulares y los números pares son yin, mientras que las rectas y los números impares son yang. Las dos fuerzas se hallan en constante fluctuación a lo largo y ancho del universo, una cediendo la tierra y otra ganándolo, como cuando la luz da paso a la oscuridad o el calor al frió, y viceversa. De su interacción surge precisamente el mismo proceso de la vida, y suele representarse gráficamente como las dos mitades entrelazadas de un círculo, una oscura y la otra clara.
Se desconoce cuando surgió por primera vez el concepto del yin y el yang, pero ya en el Siglo III a.C. los filósofos taoístas, con Zou Yan a la cabeza, fundamentaban en el toda la historia y la cosmologia. También a Zou Yan se le suele atribuir la noción del Wu Xing. O los cinco elementos “la tierra, la madera, el metal, el fuego y el agua”, con los que se suelen asociar el yin y el yang. Según Zou Yan, tanto la historia como el universo se moldearon en su día a partir de las interacciones de estos agentes, que en el fondo no eran más que manifestaciones de esa fluctuación permanente entre el Yin y el Yang.
Para los taoístas, la oposición entre el Yin y el Yang es una manifestación por la unidad trascendente de Tao “el camino”. Por otro lado, tienden a identificarlos como las dos almas que posee cada persona, la material “Yin” y la celestial o hun “Yang”; cuando están en armonía se tiene buena salud, pero si se da cierto conflicto o división entre ellas se llega a una situación de enfermedad o incluso de muerte.
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